Las ruinas de Tikal se encuentran casi escondidas en la selva, es la joya de los vestigios maya en Guatemala. La traducción del maya yucateco significa “en el pozo de agua”, este yacimiento, junto al de Méjico y Honduras, forman la conocida Ruta Maya.
Tikal tiene más de 4.000 edificaciones, la mayoría todavía sepultadas, sobre una extensión de 16 kilómetros cuadrados. El clima en Tikal es pesado, debido a la humedad, suele rondar de media unos 35º, que con el efecto humedad, se convierten en una sensación de 40º. Al ser un clima monzónico, las lluvias son torrenciales, principalmente en los meses de mayo a octubre. Por lo tanto, los dos mejores meses para la visita son diciembre y enero.
Diario de una ruta por Guatemala
Cómo llegar a Tikal
Las ruinas de Tikal se encuentran a 330 kilómetros de Guatemala City, y a 65 kilómetros de Flores, mejor lugar donde alojarse, si la idea es una estancia de 2 o 3 días.
Existe la posibilidad de tomar un vuelo en Guatemala City hasta Flores, menos de una hora, para hacer la excursión y regresar el mismo día. Lo principal de Tikal se visita de sobra en un día, otra cosa es que quieras ver un amanecer o un atardecer, en este caso lo mejor es hacer noche en Flores.
Recorrido por el interior de Tikal
Una vez llegues al centro de interpretación, verás la maqueta de las ruinas, además de un vídeo sobre el descubrimiento arqueológico y otras informaciones, además de coger un mapa. Aquí es donde empieza y termina el recorrido por la ciudadela maya.
Al estar disperso entre la selva, toca andar mucho de un lado a otro, pero lo que no te puedes perder de Tikal es lo siguiente:
- La Gran Plaza y subir al Templo II, con vistas sobre al templo del Jaguar
- Subir al Templo IV, con la clásica vista de los templos entre la selva
- Recorrer el sendero hasta el Templo V, con las mejores vistas de la Gran Plaza
- Visitar los pasadizos de la Acrópolis
- En la zona norte, el Templo VI, aunque es la zona más alejada
Si eres discreto, tendrás la posibilidad de ver bastante fauna e insectos. Los árboles están repletos de monos y diversas aves. Con el calor del mediodía desaparecen hasta el atardecer.
Consejos para la visita
Tikal es muy extenso, aunque la mayoría de zonas están cerradas, las partes que se visitan son amplias y distantes unas de otras, además del factor clima, y aún más la hora que hagas la visita.
- Intenta ir lo más ligero de ropa que puedas
- Dinero en efectivo
- Repelentes de mosquitos
- Calzado cerrado, para evitar picaduras de insectos o golpearte con una piedra
- Agua suficiente y algo tentempié para pasar el día
- Protección solar y gorro
Para la visita no precisas de guía, con la información del centro de visitantes y la que lleves tu mismo es suficiente. De todos modos, existen excursiones guiadas al complejo arqueológico.
Un último consejo, intenta llegar temprano. Te evitarás las colas de acceso, una vez dentro no tienes problema por la extensión del lugar, de todos modos las partes centrales como la Gran Plaza y principales templos suelen estar bastante concurridos.
En ocasiones se compara Tikal con las ruinas de Chichén Itzá de México, y las de Copán en Honduras. Todas ellas forman parte de la misma cultura, y si bien existen muchas similitudes, los entornos naturales de cada una son muy diferentes. Motivo más que suficiente para hacer todas las visitas a este pasado de la civilización.
Rafael y María
Preciosas fotografías. Gracias por la explicación y el recorrido. Ojalá algún día pueda ir.
Hola Sonia!
Gracias a al pasarte por el blog, nos alegra que te guste.
Ojalá puedas tener muchos y felices viajes 😉