Brujas es “otra” de las conocidas «Venecias del norte». Fue antigua capital de Flandes, prospera en el comercio y donde tuvo origen una de las primeras bolsas de valores del mundo (la primera fue en Amsterdam).
Brujas se encuentra a 90 kilómetros de Bruselas. El nombre de Brugues proviene del alemán, puentes. El encanto de la ciudad es recorrer su centro histórico medieval, así como los canales. Al inicio decíamos “la otra Venecia”, porque junto a San Petersburgo, Amsterdam y Hamburgo, son conocidas en referencia a la ciudad italiana.
Ruta por el Benelux
Cómo llegar a Brujas
La ciudad no tiene aeropuerto, pero aún así tiene los aeropuertos de Bruselas muy cerca. La distancia que separa Brujas de la capital es de 90 kilómetros. En Bélgica la red ferroviaria es muy buena, existen trenes con mucha frecuencia entre ambas ciudades, con más frecuencias en los fines de semana. Enlace trenes de Bélgica.
Aeropuerto de Charleroi, el de bajo coste en el país, también tiene conexión en tren o bus con la ciudad. Incluso cabría la posibilidad de llegar a Brujas desde el aeropuerto de Lille, en Francia, a una distancia de 86 kilómetros.
Principales visitas en Brujas
Como patrimonio de la Unesco, la ciudad tiene muchos lugares encantadores, a pesar de ser una ciudad pequeña. Lleva un calzado cómodo, el empedrado de todas sus calles llega a pasar factura en tus pies ☺️
Grote Markt, la Plaza Mayor de Brujas
De las dos plazas principales de la ciudad, esta es el centro. Si giras 360º, verás los bonitos edificios medievales que forman la plaza. Aquí es donde se concentra todo el ambiente de la ciudad.
En esta plaza es donde está el Campanario Belfort, con su torre de 83 metros de altura. Desde esta plaza parten todas las calles para adentrarse en la ciudad. Una de ellas es la Calle Mark, es la principal, donde se concentran los principales comercios de la ciudad.
La Venecia del Norte
Rozenhoedkaai, el Muelle del Rosario
Se puede decir que es el icono de Brujas. El remanso de aguas tranquilas hace de este lugar el más buscado de la ciudad. Suele estar muy concurrido de gente, intenta llegar a primera hora de la mañana o última de la tarde para disfrutar del atardecer.
Plaza Burg
Segunda plaza de importancia en Brujas. Destaca sobre los demás edificios el Ayuntamiento de Brujas (Gotische Zaal), parece sacado de un cuento, con las colmenas y pequeñas banderas que cuelgan de sus torres.
En una de las esquinas de la plaza Burg te llamará la atención el Palacio de Justicia (Brugse Vrije), con el pequeño puente que lo conecta al ayuntamiento. Para finalizar, también destaca la Basílica de la Sangre de Brujas, donde se guarda una reliquia con la sangre de Jesús.
Iglesia de nuestra Señora
Esta es la iglesia más famosa de la ciudad, con la torre de mayor altura, 122 metros. En el interior se encuentra la escultura obra de Miguel Angel, “Madonna de Brujas”. No tiene pérdida porque la torre es visible desde cualquier punto de la ciudad.
Más lugares a visitar en Brujas
Al inicio del artículo comentamos lo mucho que tiene que ver una ciudad tan pequeña. Seguimos con otros lugares para recorrer y conocer.
Los Canales
Son una constante en la ciudad, vayas por donde vayas tendrás que bordear o cruzar uno. Si tuviera que elegir uno, por obligación, quizás sería el canal junto al Hospital de San Juan. Durante el día estos canales lucen por las flores en los balcones de las casas que dan al canal, por los arbustos de jardines, etc.
Sin embargo en la noche los canales tienen un ambiente muy diferente. Más aún si la noche viene acompañada por una bruma, que deja un ambiente muy bucólico y enigmático.
Begijnhof
Estas casas en color blanco, alrededor de un arbolado jardín, era la residencia de las “beguinas de Brujas”. Una congregación de mujeres viudas, huérfanas, etc. Decidieron aislarse de la dominación masculina de la época. Se dedicaron al cuidado de enfermos y desamparados.
Minnewaterpark, el lago del amor
Si abandonas Begijnhof por su pequeño puente, llegas a este parque. Es uno de los muchos que tiene la ciudad, se trata de un parque cruzado por varios canales que puedes cruzar de un lado al otro por diferentes puentes. También se conoce por el parque de los cisnes.
Brujas ofrece muchas más actividades para hacer. Curiosos museos como el Museo de las Patatas Fritas, tiendas que bonitos y cuidados escaparates, un circuito para degustar chocolate y cerveza artesanal, y así un largo etc.
Pequeños rincones como el puente de Bonifacio justo detrás de la catedral. Calles como Sint-Jakobsstraat, zona de pastelerías, cafeterías y restaurantes donde hacer una parada.
Nosotros pernoctamos dos noches, tiempo más que suficiente para disfrutar relajadamente de la ciudad. Por la cercanía a Bruselas, también es posible una visita en el día, si eres rápido!
Rafael y María