Realizar un crucero por el Nilo son de esos viajes para hacer una vez en la vida. Navegar por un río cargado de historia, cuna del antiguo Egipto, con una longitud de 6.650 kilómetros, y cuyas aguas bañan 10 países del continente africano.
Es un viaje para combinar relax y cultura. En cada parada que desciendas del barco tendrás posibilidad de realizar muchas excursiones opcionales, además de las que incluye el paquete contratado, si esta ha sido tu elección.
Cómo realizar un crucero por el Nilo, ¿por libre o contratar un paquete?
Nosotros siempre hemos defendido los viajes por libre. Planificar y elegir tu propio itinerario, decidir qué tiempo invertir en cada visita, y libertad para seleccionar el hospedaje; para nosotros no tiene precio.
Muy atrás queda nuestro primer circuito contratado por Italia, en el año 1990, circunstancia por la que siempre hemos elegido el viajar por libre. Pero un crucero por el Nilo, tiene una cierta problemática añadida al viaje.
Información sobre el destino Egipto
Para empezar, Egipto dispone de una infraestructura algo deficitaria. Es decir, el transporte público no funciona con regularidad, y eso en el caso que exista para llegar a tu destino. Es un país muy turístico, aunque todo está pensado para agencias y tour operadores. Analizamos la posibilidad de realizar el viaje por libre, pero la balanza de los contra sobrepasaba los pros.
Por esta razón, recomendamos contratar un paquete para realizar un crucero por el Nilo. Para que tengas en cuenta en tu valoración en elegir el paquete:
Desventajas
Los cruceros coinciden en las paradas. Cuando te pongas a elegir la mejor opción, verás que las diferencias en el itinerario y horario de visitas son mínimas.
Por el motivo anterior, los templos siempre están a tope. Ten paciencia para ir en plan “rebaño” de un lado a otro.
El tiempo de la visita es contrarreloj. No esperes tener mucho tiempo para deleitarse, se trata de bajar del barco, esperan los autocares para llegar al punto en cuestión, y tras la visita de regreso al barco.
Toma el viaje en plan relax. La navegación por el Nilo ocupará varias horas al día, por lo tanto tendrás muchas horas muertas.
Ventajas
Te olvidas de alojamiento, almuerzos, cenas, entradas, etc. La manutención va incluida en el paquete contratado (asegurate de no incurrir en extras), además de incluir algunas excursiones, además de otras opcionales.
Un guía que se encarga de todo. Además de las explicaciones sobre los lugares, se encarga de comprar y repartir las entradas.
En un crucero por el Nilo no tendrás que cambiar de hotel. Sin duda es la mayor ventaja de este tipo de viajes. El no tener que trasladar maletas de un lado para otro, y desplazamientos de un sitio a otro, se agradece en un lugar tan caluroso como Egipto.
Toma el viaje como de relax. Disfrutar de un libro, escuchar música en una de las tumbonas con bonitas vistas de las orillas del río, siempre es agradable.
En este enlace tienes una Guía sobre viajes en Crucero
¿Cómo son los barcos en un crucero por el Nilo?
Como es habitual, existen varias categorías. Llama la atención que todos son ⭐⭐⭐⭐⭐ estrellas, pero se subdividen en: 5⭐ Estándar, 5⭐ Superior y 5⭐ Lujo.
Las diferencias entre estas tres categorías vienen dadas fundamentalmente por el tamaño del camarote, así como el número de excursiones opcionales que incluye el paquete contratado.
Los buques normalmente tienen entre 5 y 6 cubiertas. Planta hall, restaurante, salón-bar, y una planta superior con la piscina, sauna, y hamacas donde tomar el sol y disfrutar de la navegación por el río Nilo.
En la manutención se incluye desayuno, almuerzo, mierda y cena. Según el paquete contratado, tendrás barra libre o el poder consumir bebidas durante todo el día.
Algunas de las excursiones incluyen la comida, aunque suele ser habitual que vaya por tu cuenta y se abone directamente al restaurante.
Mejor época para realizar un crucero por el Nilo
Intenta que el viaje sea entre noviembre/diciembre y máximo febrero. Egipto es un país muy caluroso, en esas fechas tendrás calor al mediodía, pero disfrutas de mañanas frescas y tardes agradables en la cubierta del barco.
Por descontado evita el pleno verano. Las temperaturas llegan con facilidad a los 45º, quizás los lugares están menos saturados, pero no compensa el sofocante calor que se sufre.

Itinerario clásico de un crucero por el Nilo
En ocasiones se piensa que los cruceros empiezan, o terminan en El Cairo, pero no es así. Un itinerario clásico por el Nilo suele tener la salida/llegada desde Luxor o desde Asuán, según lo elegido. Si es cierto que la llegada al país, Egipto, suele ser por el aeropuerto internacional de El Cairo, para luego tomar otro vuelo de conexión a la ciudad de donde salga el crucero.
En Luxor fue donde llegó el avión procedente de España, y también donde se realizó el embarque al barco que iría navegando del Nilo de norte a sur.
Guía para conocer la ciudad de El Cairo
– Luxor – Esna – Edfú
Necrópolis de Tebas
Valle de los Reyes
Templo Medinat Habu
Colosos de Memnón
Templos de Karnak y de Luxor
– Edfú – Kom Ombo – Aswan
Templo de Horus
Templo de los dioses Sobek y Haroeris
– Asuán
Presa de Asuán
Visita del obelisco inacabado
Templo de Abu Simbel
Todas estas paradas, visitas y excursiones realizadas, van acompañadas de bastantes horas de navegación, como ya comentamos anteriormente.
Muchas excursiones se inician y terminan en el mismo puerto de embarque. Sin embargo, otras se inician en un puerto, y el buque prosigue navegando hasta la siguiente parada donde te recogen de nuevo.
La visita de Abu Simbel es una de las que requieren más esfuerzo. Empieza con un madrugón considerable, sobre las 02:00 de la madrugada, para seguir en autobús por una carretera que cruza el desierto, unas tres horas más.
Aunque, sin duda, es una de las visitas que se deben hacer si o si.
Nuestra opinión sobre los cruceros en general
Para los viajeros acostumbrados a realizar circuitos donde todo está planificado de antemano, en un crucero por el Nilo se sentirán en su ambiente.
Por contra, para los que somos de montar el viaje a nuestro gusto, variar el itinerarios, con cambios de último momento, o sea, improvisando un poco, se hace algo pesado.
De cualquier modo, es un viaje inolvidable y que debería estar en la lista de cualquier viajero. Lo cierto es que un viaje de cierto relax, porque no todo es descanso, aquí las prisas van por delante; es una manera de alternar y quizás valorar aún más la experiencia de viajar por libre!
Rafael y María